Mi Reloj, De Mark Twain

Mi hermoso reloj nuevo había funcionado durante dieciocho meses sin atrasarse ni adelantarse, sin que se rompiese ninguna pieza de su mecanismo o

La luna roja, De Roberto Arlt

Nada lo anunciaba por la tarde. Las actividades comerciales se desenvolvieron normalmente en la ciudad. Olas humanas hormigueaban en los pórticos encristalados de